El impacto del COVID-19 no solamente está afectando a la vida humana sino también a la de los animales. Por ello, la Organización Colegial Veterinaria (OCV) ha elaborado un grupo de seguimiento del COVID-19 para conocer la evolución de la pandemia y su relación entre animales y personas.
Esta Iniciativa ya fue considerada el año pasado tras la crisis de la listeriosis por lo que urgía contar con un grupo de trabajo que preste especial atención a las interrelaciones que existen entre animales y personas, especialmente aquellos que son de compañía. Ahora que se ha constituido este grupo, el objetivo es conocer más acerca de la salud humana, la salud animal y la protección del medio ambiente.
El grupo está formado por prestigiosos profesionales de la materia: Elías Rodriguez Ferri, microbiólogo veterinario, José María Eiros Bouza, microbiólogo de medicina y tres especialistas en sanidad animal, Lucas Domínguez, Antonio Arenas y Christian Gordázar. El grupo asesor no está cerrado ya que se incorporarán personas de reconocido prestigio en cada materia. El objetivo principal de estos profesionales es el de analizar continuamente la evolución de la enfermedad y conocer la manera en la que afecta a los animales domésticos tras haberse detectado contagios de personas en animales en Hong Kong y Bélgica.
El presidente de la OCV ha señalado que “hay que tener en cuenta que estamos ante un virus muy reciente, por lo que todavía seguimos estudiando su comportamiento y posibles mutaciones, de manera que los veterinarios debemos permanecer alerta y no destacar nada”.